D.O. Vinos de la Tierra de Castilla y León

«Vino de la Tierra» indica una categoría de vinos con indicación geográfica, con características específicas determinadas por las condiciones ambientales y de cultivo, según lo establecido en cada Indicación Geográfica, esto se denomina «Indicación Geográfica Protegida» (I.G.P.). Esta indicación geográfica es equivalente a las indicaciones: vino regional (Reino Unido), vin de pays (Francia, Luxemburgo y la provincia italiana de Valle d’Aosta), indicazione geografica tipica (Italia), vinho regional (Portugal), Landwein (Alemania)o landwijn (Países Bajos). La denominación puede incluir vinos de aguja, vinos de licor y vinos de uvas muy maduras.

«Vinos de la Tierra» son productos de alta calidad que tienen más libertad a la hora de elaborar vinos que en la Denominación de Origen «(D.O.), en cuanto a la uva utilizada, su elaboración o la cantidad de vino que pueden elaborar. Por esta razón, muchos productores de vino y enólogos eligen esta nomenclatura para diseñar sus nuevos productos sin tantas restricciones como las marcadas por una D.O.

V.T. de. Castilla y León, «Vinos de la Tierra de Castilla y León», es una indicación geográfica protegida (IG I.P.), utilizada para designar los vinos de la tierra elaborados con uvas producidas en la comunidad autónoma de Castilla y León. Bajo esta indicación protegida, se producen vinos tintos, blancos y rosados ​​en 317 localidades en las provincias de Ávila, Burgos, León, Palencia, Salamanca, Segovia, Soria, Valladolid y Zamora.

Un clima mediterráneo continental de escasa lluvia, junto con la diversidad de suelos, son las características más notables de la región, que coincide aproximadamente con la cuenca del Duero o la meseta septentrional, junto al perímetro montañoso que la rodea.

Sin embargo, los vinos producidos en Castilla y León pero que ya tienen su propia Denominación de Origen están fuera de los Vinos de la Tierra de Castilla y León. Como, por ejemplo, Bierzo, Ribera del Duero, Rueda o Toro.

Los vinos de la tierra de Castilla y León, en su diversidad, presentan las siguientes características:

  • Los vinos blancos jóvenes son frescos y afrutados, con gran presencia en la boca, lo que la diferencia de manera especial de los vinos blancos jóvenes que se elaboran en otras regiones.
  • Los vinos rosados, especialmente aquellos elaborados en áreas tradicionales para este tipo de vino, son frescos, con aromas de frutas rojas y un paladar agradable. Si son de la variedad de uva Prieto Picudo, son muy especiales, con un importante cuerpo y memoria afrutada en la ruta retro nasal.
  • Los vinos tintos son potentes, con aromas de fruta madura, gran carga de materia colorante, buena estructura y gran capacidad para largas «crianzas» (envejecimiento).
  • Los vinos de aguja corresponden a una elaboración muy tradicional en algunas zonas de Castilla y León. Tienden a ser vinos rosados, con mayor intensidad de color, fresco, gran viveza, acentuado por la aguja y mayor estructura en la boca.
MAP Castilla y León